Nepeta pretende ser una voz de opinión del medio natural de Alcalá de Henares en particular y de otros parajes de interés para que todos sepamos valorar y respetar los recursos naturales.
sábado, 12 de abril de 2008
NATURALEZA EN LA SIERRA DEL RINCÓN
La Sierra del Rincón es una comarca situada en la Sierra Norte de la Comunidad de Madrid entre las estribaciones de Somosierra y el Macizo de Ayllón. Comprende cinco términos municipales, concretamente: Horcajuelo de la Sierra, Montejo de la Sierra, La Hiruela, Prádena del Rincón y Puebla de la Sierra. Todas ellas conforman la Mancomunidad Sierra del Rincón, catalizadora del desarrollo sostenible de la comarca.
La Sierra del Rincón, declarada como Reserva de la Biosfera , constituye un entorno donde paisaje y paisanaje confluyen: el clima, los bosques, los ríos, arroyos y riberas, las dehesas, su flora y su fauna armonizan de manera perfecta con los usos y costumbres tradicionales y actuales.
Estos pueblos de la Sierra Norte madrileña nos acercan al presente, pasado y futuro; con su rico entorno natural, sus instalaciones y alojamientos para potenciar el turismo ambiental; con sus tradiciones agrícolas, ganaderas y culturales y sobre todo por ser ejemplo de sostenibilidad de los recursos, para que así como lo vemos ahora, puedan verlo las generaciones venideras.
HORCAJUELO DE LA SIERRA
El término municipal de Horcajuelo abarca una superficie de 24,40 km2 y se encuentra encajado en un valle por donde discurre el Arroyo de La Garita de Norte a Sur.
El núcleo urbano se asienta sobre un cerro a unos 1145 m de altitud y debe su nombre al término “ Horca” o “pueblo entre ríos”, al estar rodeado en sus laterales por los arroyos Grande y el mencionado de La Garita.
La arquitectura rural es uno delos recursos turísticos más importante del término. Sus construcciones tradicionales bien conservadas supuso la declaración de “núcleo de interés rural “ en los años 80.
Destaca la Iglesia Parroquial de San Nicolás de Bari, en perfecto estado, de estilo barroco con capilla gótica del siglo XV. A las afueras del pueblo se encuentra la Ermita de la Soledad.
Una construcción típica de la comarca, testigo de la tradición ganadera es la existencia del potro de herrar. Se utilizaba para inmovilizar a los animales para herrarlos o bien practicarles curas.
MONTEJO DE LA SIERRA
Próximo a Somosierra, el término municipal de Montejo tiene una extensión de 31,37 km2 y presenta una configuración en casi todo su territorio predominantemente montañosa.
El pueblo se encuentra a una altitud media de 1155 m, y era conocido antiguamente como Montejo del Rincón.
La arquitectura rural se ha mantenido hasta hoy día, utilizando para las construcciones nuevas y restauradas materiales autóctonos.
Destacan la Iglesia Parroquial de San Pedro, probablemente del siglo XV, dao su artesonado mudéjar; la Ermita de la Soledad del siglo XVI, ubicada en el camino a La Hiruela y la Ermita de Nazaret, iglesia del pueblo desaparecido del mismo nombre y distante en 2 km de Montejo.
Montejo de la Sierra es, probablemente, el pueblo más conocido dela Sierra del Rincón en la Comunidad de Madrid, sobre todo por tener dentro del término una representación de bosque atlántico de hayas en el monte de El Chaparral. Es el conocido hayedo de Montejo, el más meridional de Europa.
LA HIRUELA
El término municipal de La Hiruela abarca una superficie de 17,2 km2 y se encuentra situada en el extremo noroeste de la Comunidad de Madrid. Debido a su aislamiento geográfico, el pueblo mantiene su arquitectura rural intacta arropada por un entorno de alto valor.
El núcleo urbano se asienta entre bosques y montes a 1257 m. de altura entre las vías pecuarias de la Cañada real y el Cordel de Montejo, de ahí que deba su nombre al topónimo “Hijuela” definido como “ camino o vereda que atraviesa el camino real hacia los pueblos u otros sitios, algo desviados de él”.
Destacan la Iglesia de San Miguel Arcángel, edificio restaurado con un hermoso arco triunfal de medio punto, y el Molino harinero situado en un enclave natural privilegiado al lado del río Jarama.
Otros elementos a destacar son el colmenar antiguo bajo el pueblo entre el molino y el Arroyo de la Fuentecillas y la Capilla de la Virgen de Lourdes, entre la depuradora y la carretera.
PRÁDENA DEL RINCÓN
El municipio de Prádena del Rincón, de tradición ganadera, abarca una superficie de 22,50 km2. presenta un relieve accidentado en su parte Este, dominado por el bosque de melojos, abriéndose hacia el oeste en un valle amplio por el que discurre el principal curso fluvial, el río de La Nava.
El núcleo urbano se asienta sobre una colina a unos 1104 m, y tiene en sus valles su principal riqueza. Sus praderas y dehesas, son reflejo de la pujanza ganadera, y hacen honor al nombre del pueblo: Pradena. Además el término se haya surcado de vías pecuarias como la Cañada Real de las Merinas que desde Guadalajara comunicaban con Lozoyuela y Madrid.
Destaca la Iglesia parroquial de planta románico-mudéjar en honor a Sto. Domingo de Silos, de gran belleza. Otros elementos característicos son el potro de herrar, el molino, los pilones y los “tinaos”.
PUEBLA DE LA SIERRA
La localidad de Puebla de la Sierra se encuentra abrazada por dos barreras montañosas formando un circo llamado Sierra de la Puebla, al fondo del cual discurre el río Puebla en cuyas aguas vierten numerosos arroyos. Su término municipal de 57,71 km2 es el más extenso de los que conforman la Sierra del Rincón.
El pueblo se sitúa a 1161m, y anteriormente se llamaba Puebla de la Mujer Muerta dado que estaba situado a los pies de los cerros de la Mujer Muerta, nombre que hace alusión a la forma de mujer yacente de los cerros.
Uno de los pilares de su economía ha sido la ganadería, tal y como se manifiesta por la existencia de numerosos corrales y tinados bien aislados o agrupados, utilizados por los pastores y ganados como residencias temporales y, el uso forestal de sus montes para surtirse de madera, leña y carbón.
Destaca la recuperación de su arquitectura tradicional en piedra y madera, similar a la arquitectura negra de los pueblos colindantes de Guadalajara. La mayoría de los edificios de nueva construcción han mantenido la arquitectura tradicional.
La Iglesia parroquial de Purísima Concepción, del siglo XVII, se encuentra perfectamente restaurada. Por otro lado, junto a la Fuente Vieja, se encuentra la Ermita de la Soledad
NATURALEZA DE LA SIERRA DEL RINCÓN
La topografía de la Sierra del Rincón viene marcada por su altitud. Las condiciones de temperatura y humedad varían con la altura delimitándose por ello diferentes zonas térmicas. Esta zonación altitudinal térmica genera ambientes climáticos diferentes que se manifiestan en diferentes formaciones vegetales a las que se asocian comunidades faunísticas características.
Además de la altitud influyen otros factores como la orientación, pendiente, proximidad a fondos de valle y puntos de agua ,entre otras . que hacen que aparezcan microclimas dentro de estos pisos bioclimáticos principales.
Los principales ecosistemas que encontramos a medida que ascendemos en altura son:
ENCINARES
Como formación boscosa primigenia bien conservada no existe. El uso del territorio, sobre todo ganadero , ha reducido este sistema a escasos ejemplares de encina , o pequeños grupos, situados en áreas de mayor pendiente o pedregosas . El piso del encinar en este caso está ocupado por matorral de sustitución donde la jara es la especie más representada. Dependiendo del grado de humedad estos jarales pueden ser de jara pringosa, en el caso de ambientes más secos, o por la jara laurel, en zonas de mayor humedad.
Estas formaciones tienen como acompañantes otras especies acidófilas como el cantueso, el torvisco, las botoneras y el tomillo blanco o mejorana.
Entre las especies faunísticas más representativas de este sistema destacamos : reptiles como la lagartija colilarga, y aves como, totovía, rabilargo , curruca carrasqueña y alcaudón común . Esta zona es el hábitat propio del apreciado conejo así como de uno de sus depredadores: el zorro.
MELOJAR
El robledal de melojo o rebollo es la formación vegetal que domina y define la Sierra del Rincón mostrando una variada fisonomía.
En algunas zonas encontramos formaciones boscosas con ejemplares de porte medio , entremezclándose con melojos centenarios , robles albares, rabiácanos o arce de Montpelier, serbales de los cazadores, mostajos.
Otra parte del melojar se presenta con un porte casi arbustivo, mezclado abundantemente con matorral como jara laurel, brezales de brecina, brezo blanco, brezo colorado, y gayubares que tapizan el suelo a modo de alfombra en zonas más soleadas dentro del melojar húmedo. También podemos encontrar ejemplares aislados de codeso, cambroño, retama negra y en zonas altas el enebro común.
La fisonomía más característica del melojar en toda la comarca es la Dehesa Boyal. Este sistema silvo-agro-pastoral combina áreas más o menos boscosas con zonas de cultivo, actualmente la mayoría en desuso, y extensos pastizales. Aunque de origen antrópico se trata de un sistema estable donde el hombre con su actividad ganadera forma parte de este ecosistema, tan complejo y de alto valor ecológico. Representa la explotación racional y sostenible de los recursos naturales .
Estas dehesas boyales albergan una gran diversidad fáunica atendiendo a diferentes relaciones tróficas que se establecen .
La abundancia de micromamíferos , como el topillo , atraen a depredadores tan conocidos , dentro de las aves, como el cernícalo vulgar, busardo ratonero, milano negro y milano real. Especies de hábitos nocturnos como la musaraña ,sapo corredor y erizo están asociados a la presencia del audible Cárabo.
El suelo de estas dehesas son ricos en lombrices , moluscos y muchos insectos propiciando la elección como cuartel de invernada de aves tan conocidas como chocha perdiz o becada, avefría y otras presentes todo el año como el mirlo común, pito real y zorzal común.
Estas áreas ,con gran número de semillas, atraen a numerosas aves granívoras como los fringílidos pinzón vulgar, verderón , verdecillo así como escribanos soteños y cerillos. Por otro lado, sacando ventaja de la actividad humana, aparecen individuos oportunistas como la urraca y el estornino. La presencia de todas estas aves conlleva la existencia de depredadores casi exclusivamente ornitófagos como el gavilán.
En los melojares más densos, encontramos aves típicamente forestales como el arrendajo, agateador común, herrerillo común y el azor. Estas zonas constituyen un buen refugio de mamíferos como el corzo y el jabalí.
ABEDULAR
Forman bosquete en las zonas más húmedas del piso del melojar. Requieren una humedad ambiental muy elevada por lo que el periodo estival es una época muy crítica. Los ejemplares se encuentran en fondos de valle y orientaciones norte como los existentes en la confluencia del arroyo de la Fuentecilla con el río Jarama . Actualmente la presencia de abedulares, no solo en la Comunidad de Madrid sino en el Sistema Central se pueden considerar como relícticos, de ahí su importancia.
Estas mismas condiciones ambientales son propicias para la aparición de otra especie arbórea de gran importancia ,el álamo temblón de gran valor ecológico y ornamental. Se puede encontrar en el abedular o bien aislados en determinados puntos de máxima humedad.
Dentro del cortejo florístico del abedular destacamos plantas como el poligonato o sello de Salomón, pimpinilla menor, hierba de las dos hojas y las verónicas.
Dentro de los hongos existen especies específicas que han establecido relaciones simbióticas con las raíces de estos árboles como el lactario peludo del abedul, lactario plomizo. Otros hongos saprófitos adornan el tronco de ejemplares débiles , viejos o muertos, es el caso del yesquero del abedul.
La fauna es similar a la presente en hayedos y melojares si bien por el carácter blando de su madera y la presencia en ella de abundantes larvas de insectos, es frecuente observar y escuchar a pícidos como el Pico picapinos.
HAYEDO
Se sitúan en laderas del margen derecho, en el inicio de la cuenca del río Jarama. Estas manchas boscosas ocupan suelos silíceos profundos , aunque a veces ocupan pedregales. Durante la sequía estival , propia de estas latitudes, la humedad ambiental se obtiene por las tormentas , las lluvias de relieve y la condensación de la humedad del aire al ascender por el valle . Solo así puede superar esta época tan crítica . Es por ello que los hayedos del Sistema central ,en los que se incluye el Hayedo de Montejo, se consideran sistemas muy frágiles y de carácter relíctico.
El hayedo es un bosque cerrado y umbrío cuyo estrato arbóreo recoge la totalidad de la radiación solar, por lo que el sotobosque es pobre en densidad y número de especies. Las condiciones de humedad, sombra y suelo, con gran aporte de materia orgánica , hace que abunden geófitos, plantas cuya unidad de reproducción está bajo tierra, como las hepáticas, los gladiolos y el característico eléboro fétido.
Este hayedo muestra mayor número de introgresiones de otras comunidades vegetales , apareciendo junto a las hayas ejemplares de abedul , melojo y roble albar.
El carácter más abierto de este hayedo permite la aparición de numerosas especies de matorral como codesos ,cambroños, brecinas y brezos, arándanos, retama negra, escobones y algún enebro común .
En zonas de suelo más profundo ,con hayas viejas, es característico la presencia de plantas como el martagón, narcisos y aros.
En las zonas más umbrosas , al pie de las hayas, aparecen plantas tan escasas como conocidas ,es el caso de la uva de zorra, otras abundantes como hepática , fresa silvestre, hiedra, celidonia menor y sanículas. Próximos a los arroyos encontramos plantas tan tóxicas como los acónitos y otras como los calderones, de grandes flores amarillas.
En los claros, no degradados, aparece una singular y vistosa formación vegetal dominada por el helecho común.
Por su importancia en la cadena trófica , merece especial atención la presencia de tejos, acebos y cerezos silvestres que se encuentran en las zonas altas del hayedo.
Dentro de la fauna que podemos encontrar en el hayedo destacamos aves como papamoscas cerrojillo, trepador azul, curruca capirotada, reyezuelo listado, reptiles como lagarto verdinegro , mamíferos como el tejón o la garduña.
Otro aspecto a tener en cuenta es la presencia , principalmente otoñal, de los hongos. Alguno de ellos tan representativos como mucídula viscosa, licoperdo erizado y la abundante pardilla.
PINAR
Los pinares que encontramos en la Sierra del Rincón son de repoblación .Existen dos pinares diferentes .El más abundante es el situado en las zonas más altas ,próximo a la línea de cumbres. La especie elegida es el pino albar o silvestre ocupando el piso del melojar al que se adapta perfectamente. El otro pinar existente ocupa el piso del encinar localizándose en la zona sur de Puebla de la Sierra. La especie elegida, en este caso, es mayoritariamente el pino laricio.
El estrato arbustivo de estos pinares es el propio de las comunidades vegetales de los pisos del encinar y melojar. Su abundancia viene determinada por la densidad de repoblación.
Destacamos el pinar de silvestre por su abundancia y atractivo. La comunidad faunística que aprovechan las piñas son, entre otras, las ardillas , aves tan representativas como el piquituerto, visitantes invernales tan interesantes como el verderón serrano, lúgano, pinzón real, que aprovechan las semillas , y el zorzal real y zorzal charlo determinantes en la dispersión del muérdago .Existe también un grupo numeroso de aves insectívoras que aprovechan las plagas de orugas de lepidópteros como la monja y la procesionaria del pino destacando el reyezuelo sencillo , herrerillo capuchino o el carbonero garrapinos.
Estos pinares son elegidos, como zona preferida, por aves como el búho chico y el aguililla calzada debido a la abundancia de micromamíferos .
Por último destacar que los pinares suelen ser frecuentemente visitados por su riqueza micológica. Algunas con interés culinario como el níscalo, o el boleto edulis y otras por su toxicidad y vistosidad como la amanita muscaria.
PIORNAL DE ALTA MONTAÑA Y PRADOS DE CUMBRES
Por encima del piso del melojar nos encontramos una formación vegetal constituida por el piorno serrano .Esta leguminosa arbustiva está bien adaptada a la existencia de nieve durante largo tiempo creando por debajo de la misma un microclima singular. Este piso es poco diverso en especies arbustivas, no existiendo especies arbóreas autóctonas, si bien acompañando al piornal encontramos ejemplares de enebro alpino de porte rastrero.
Para favorecer la trashumancia de valle a valle y la existencia de pastos aprovechables en la época de verano por el ganado, parte de este piornal fue eliminado. En estos prados de cumbres se encuentran especies pascícolas tan interesantes como la cañuela, la pelosilla o cerrilejo y en las zona más encharcadas el cervuno. Estos prados se adornan durante gran época del año de los llamativos colchicos.
Esta zona de alta montaña es elegida por una de las mariposas diurnas más conocidas y protegida : la apolo.
Esta estructura mixta de matorral , prado y zonas pedregosas es elegida por algunas aves para criar como acentor común , bisbita alpino, alondra, collalba gris, pardillo común ,roquero rojo y curruca rabilarga.
ROQUEDOS Y CORTADOS
Ecosistema definido por su geología y geomorfología, sometido a una climatología extrema tanto de altas como de bajas temperaturas.
Las especies vegetales que allí existen son especialistas en adaptarse no solo a temperaturas extremas sino también a una baja disponibilidad de agua,
Existen plantas que colonizan la roca viva como los líquenes. Destaca, por su color y semejanza a un mapa geográfico, el Rhizocarpon geogrphicum. Otras especies vegetales se adaptan a fisuras con escorrentía, es el caso de helechos como el culantrillo. Otras, necesitan de grietas más anchas o zonas más llanas como boca de dragón , sedos o uñas de gato.
La fauna de canchales , roquedos y cortados es muy específica. Podemos encontrar, entre los reptiles,a la maltratada víbora hocicuda , lagartija roquera, y aves insectívoras como el colirrojo tizón, roquero solitario, acentor alpino, avión roquero, golondrina común y daúrica. Córvidos como la chova piquirroja o el cuervo y rapaces como el buitre leonado, águila real, halcón peregrino durante el día y el búho real , el gran duque, durante la noche.
COMUNIDADES DE ARROYOS Y RIOS
La vegetación asociada a los arroyos y ríos merece un tratamiento aparte del resto de comunidades vegetales, ya que esta vegetación depende del nivel freático. El grado de humedad edáfica , así como su duración durante el año hace que aparezcan diferentes formaciones vegetales.
Las formaciones más representativas son las saucedas y las alisedas. Existen dos tipos de saucedas .Así en arroyos altos y pedregosos aparecen las saucedas de bardaguera blanca. Se trata de una sauceda de porte arbustivo donde domina la bardaguera blanca , este arbusto tiene un alto valor ecológico ya que es el primero en colonizar estos tramos adaptándose a un regimen hídrico fluctuante, reteniendo materiales y permitiendo la aparición de otros sauces dentro de este sistema como el sauce colorado o sagartillo, la sarga negra y otros arbustos propios de otras comunidades riparias como el arraclán.. También encontramos juncales de glicerias, berros así como el nabo del diablo. Esta sauceda debido a su localización con cauces estrechos y poco caudal sufre el estiaje acusadamente. El otro tipo de sauceda aparece aguas abajo en suelos con poca pendiente o con pequeñas depresiones siendo el drenaje del río más lento y presentando el suelo un grado alto de encharcamiento, son las saucedas de atrocinerea o de bardaguera .Estas saucedas de porte arbóreo son de reducida extensión y en ellas encontramos otros árboles como el fresno, bardaguera blanca, arraclan, majuelo y endrinos, plantas trepadoras como madreselvas, yedras, vid silvestre y como matorral más abundante las zarzas y juncales.
La alisedas al igual que las saucedas de atrocinerea se desarrollan sobre suelos aluviales que conservan la humedad a lo largo del año. Este bosque queda relegado a valles estrechos y gargantas angostas como las alisedas de Puebla de la Sierra. Se trata de un bosque denso y umbrío donde domina el aliso y en el que podemos encontrar otros árboles como fresnos, avellanos y bardagueras .Es en este ambiente tan húmedo donde se refugian otros elementos de otras comunidades relictas como el abedul , álamo temblón y acebo. Debido a la umbría su sotobosque es escaso pero encontramos zarzales, madreselvas , majuelos y endrinos.
La fauna de estos bosques de ribera están relacionados estrechamente con el agua y la humedad tanto edáfica como ambiental. Parte de la base de la cadena trófica se encuentra debajo de las piedras del lecho en forma de fases larvarias de diferentes especies de insectos adaptadas a las fuertes corrientes y utilizando diferentes estrategias para no ser arrastradas, es el caso de los canutillos de piedra que sirven como lastre a los tricópteros o formas aplastadas como las perlas , fase larvaria de un plecóptero. Alimentándose de los insectos acuáticos encontramos anfibios como rana patilarga , aves como la lavandera cascadeña, mirlo acuático y peces como la trucha común. Otras especies requieren del ambiente húmedo como el ruiseñor común y ruiseñor bastardo o el chochín. Estos tramos son propicios para detectar alguna marca o señal que confirme la presencia de la nutria como son los toboganes en alguna orilla o excrementos depositados en alguna piedra del río.
VISITA LA SIERRA DEL RINCÓN DURANTE LOS DOCE MESES DEL AÑO: POR NATURALEZA
ENERO
En este mes los paisajes nevados de toda la comarca estimulan todos nuestros sentidos. El contraste de las nieves con la geomorfología, el mar de cumbres, bosques nevados y praderías obligan la visita a esta comarca. Las dehesas boyales muestran su estructura y fisonomía típica invernal.
Durante este mes, el contraste de las masa arbórea con el clima es máximo. Las coloraciones moradas de las hayas, las nieblas, las nubes de condensación, el reflejo de la luna en los bosques son motivos suficientes para visitar el entorno natural.
Es momento de acercarse a los pueblos y utilizar sus infraestructuras turísticas.
FEBRERO
Las Dehesas Boyales y praderías de Prádena están en su máxima expresión de contrastes cromáticos, con los melojos sin hojas y el verde de los pastos. La visita a este ecosistema es obligatoria durante todo el año.
Es buen momento para visitar los pueblos. Desde Enero, la cigüeña blanca empieza a ocupar sus nidos.
MARZO
Desde la segunda quincena de febrero y en este mes se aprecian los pasos prenupciales de grullas, milano negro ,aguililla calzada y gansos, entre otros. Estos pasos migratorios se alargan hasta el mes de mayo. Es momento de visita obligada de los altos de La Hiruela, Puebla y Collado de las Palomas.
Es el momento de las primeras floraciones de narcisos, primaveras, hepáticas en los bosques aún sin hojas de hayedos y melojares.
La actividad de los anfibios está en su punto álgido. En las zonas encharcadas de la dehesa, con juncales podemos escuchar y observar los coros de ranita de San Antón, voces de localización de Sapo partero común, amplexus de sapo corredor, gallipatos y tritón jaspeado..
ABRIL
Paso migratorio fuerte. Además de los reseñados, puede verse el paso de aguilucho cenizo.
La entrada de luz en los bosques de hayedos, melojos y abedulares favorecen las floraciones de las violetas, las consueldas y las saxífragas llamando la atención a las especies polinizadoras..
Las hayas y melojos tiene sus yemas engrosadas. Destacan lo paisajes generados por las nubes, la lluvia, y las condensaciones de nubes por el efecto cordillera.
Los hongos de primavera pueden presenciarse en las zonas de soto. Es el momento de las giromitras, y las colmenillas.
MAYO
La hoja del haya ha abierto y se aprecia un primordio de hoja granate en los melojos. El alto contraste cromático nos da información sobre la fisonomía y características de los diferentes bosques. La dehesa boyal muestra un gran contraste cromático.
Florecen los brezos rosas, los brezos blancos, los amarillos piornos y ranúnculos, las moradas verónicas y las blancas estrelladas y los matorrales se cubren de un manto floral uniforme de blancas jaras y morados cantuesos.
Buena época para percibir diversos cantos de aves, con sus voces de celo, en los sotos de los Ríos y arroyos Garita, Puebla, Fuentecilla, Jarama como el “chichipan” de los carboneros y los “tuios” de los mosquiteros.
Los sotos presentan su mayor contraste con la geología del entorno.
JUNIO
Destacan los ambientes lumínicos creados en los bosques. Es momento de pasear entre hayas y melojos.
Florecen los gordolobos, las dedaleras, el orégano de monte, el jaguarzo y las botoneras.
Las mariposas de diversos colores están en su actividad máxima libando flores, nacaradas, limoneras, macaones, mariposas de las aristoloquias, arlequines y las protegidas apolos.
La fauna forestal muestra su contenido, rabilargos, arrendajos, azores, huellas, marcas y señales. Es momento de visita de melojares de Puebla, Prádena y Montejo, y los sotos de Horcajuelo y La Hiruela.
JULIO Y AGOSTO
Son los meses de estío. El calor aprieta y hay que acercarse a los bosques de umbría y dispuestos a Norte.
Comienza el celo del corzo, y podemos encontrarnos en cualquier momento a la pareja entre los melojos. Es necesario respetar las épocas de reproducción de todos los animales.
Empieza la migración postnupcial de las aves. Hay que acercarse desde este mes y los dos siguientes a los Puertos de La Hiruela, de Puebla y al Collado de Las Palomas. Paso de cigüeñas blancas y milanos negros
SEPTIEMBRE
Visita obligada a los puntos de observación de aves migratorias. Desde este mes hasta noviembre se pueden observar pasos de gansos, grullas, con sus auidibles y visibles formaciones en V , así como otras especies a sus zonas de invernada.
OCTUBRE
El paisaje de las especies caducas con el cambio de color de sus hojas es el protagonista del otoño. El hayedo, el melojar y los serbales de cazadores están en su máxima expresión cromática.
Empieza la temporada micológica. Cada ecosistema tiene sus setas. Hay que respetarlas, su papel es fundamental para el equilibrio de los ecosistemas.
NOVIEMBRE
Los álamos temblones de La Hiruela y Puebla nos muestran su belleza. Se acercan las heladas y las nieblas, las lluvias. Es momento de visitar la hermosa arquitectura rural de los pueblos, sus calles, sus monumentos, sus olores, sus colores.
Las dehesas boyales y los melojares, debido a la marcescencia de las hojas de los robles, manteniéndose en el árbol hasta la siguiente temporada, brindan al paisaje un cromatismo especial.
DICIEMBRE
La observación de las cresterías, canchales y gleras de La Hiruela, Horcajuelo , y las vistas desde el alto de Puebla de la Sierra de la hermosa panorámica de toda la Sierra del Rincón, así como los cortados sobre el río Puebla nos muestran la alta riqueza geológica y geomorfológica de la comarca.
Es la época de celo de las grandes rapaces: águila real, buitre leonado y de una rapaz nocturna: el búho real, el duquecon su típico ulular profundo, es perceptible a gran distancia.
PUNTOS DE OBSERVACIÓN DE AVES
La Sierra del Rincón presenta un alto interés ornitológico. La presencia de diversos ecosistemas, como cumbres, collados, cresterías , roquedos y canchales, bosques como melojares , hayedos y pinares, sotos y riberas, así como sistemas antropizados como las dehesas boyales , praderías, y el propio ecosistema urbano favorecen la presencia y visualización de aves durante todo el año bien sean residentes, invernales o de paso.
Los puntos más interesantes para la visualización de las mismas son:
PARA VER PASOS MIGRATORIOS DE AVES: Para ver los pasos migratorios de aves son lugares apropiados los puntos altos. Pueden verse pasos migratorios prenupciales ( de febrero a marzo) y postnupciales ( desde agosto hasta noviembre). Dependiendo de la época pueden verse grullas, milanos negros, gansos, aguilillas calzadas, aguiluchos cenizos, cigüeñas, etc..
Estos puntos son:
- Puerto de La Hiruela, (Carretera local M-137 de Montejo de la Sierra a La Hiruela)
- Puerto de la Puebla o de Cerro Montejo ( Carretera M-130 de Prádena del Rincón a Puebla de la Sierra. )
- Collado de Las Palomas ( situado en el collado que da su nombre). Parte del Puerto de Puebla de la Sierra y por una pista forestal hacia el Collado Salinero se llega al Collado de las Palomas. También se puede acceder desde Puebla de la Sierra dirección Pradeña del Rincón, por una pista forestal que sale a mano derecha de la carretera M-130, antes de llegar al Puerto de La Puebla.
PARA VER AVES FORESTALES:- (Dehesas boyales, melojares y hayedos de la comarca). Destacan:
- Carretera de Montejo a Cardoso. Km 5.300. Área recreativa la Dehesilla.
- Dehesa Boyal y melojar de Prádena del Rincón. Por la M-130 , a 2 km. de Prádena del Rincón dirección Puebla de la Sierra nos encontramos a mano derecha con el melojar adehesado .
- Hayedo de Montejo. Carretera de Montejo a Cardoso de la Sierra.
- Pinar de Pino silvestre de Puebla de la Sierra, Carretera M-130 de Prádena a Puebla, tras pasar el Puerto de la Puebla, nos encontramos con una formación de pino albar, con melojos intercalados.
AVES DE ZONAS HÚMEDAS- (Sotos y riberas de los ríos y arroyos, lagunas...).Dentro de estos destacan:
- Soto de la confluencia del arroyo Garita con el arroyo Grande en Horcajuelo de la Sierra, pueblo.
- Soto situado en la confluencia del Arroyo de la Fuentecilla con el Río Jarama en la carretera de La Hiruela a Cardoso de la Sierra, a 1km del primer pueblo.
- Laguna del Salmoral. A 2 km de Prádena del Rincón por la M-130, dirección Puebla de la Sierra.
AVES DE CORTADOS- (Cortados, canchales y roquedos). Destacan los cortados sobre el Río Puebla, zona de avistamiento de Buitre leonado, que pueden divisarse desde la carretera M-130 de Puebla de la Sierra a Robledillo de la Jara a 5 km de Puebla, en el único descansillo que hay en el lado izquierdo.
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